- Detalles
- Creado en 28 Octubre 2019
- Visitas: 741
Lecturas Otoñales
Con la llegada del otoño, las casas se llenan de alfombras, los niños llaman a la puerta clamando por sus caramelos y el mundo se dispone a pasar miedo de la forma más efectiva. Fiestas, rituales, películas, juegos y sí, también estos siguientes 10 mejores libros para leer y pasar algo de miedo bajo las sábanas otoñales. Clásicos para leer en cualquier momento pero, especialmente, en otoño, los bosques parecen suspirar y la necesidad de pasar algo de miedo se convierte casi en un ritual en sí mismo.
¿Qué libros para leer este otoño tienes preparados?
La mujer de negro, de Susan Hill
Más de un millón de ejemplares vendidos consolidan la obra publicada en 1983 por Susan Hill. Adaptada en versión cinematográfica con Daniel Radcliffe como actor protagonista, La mujer de negro nace de la vieja leyenda de una madre soltera cuyo hijo murió ahogado en las marismas de un pueblo al que el protagonista, el abogado Arthur Kipps, regresa para ser testigo del paso de un fantasma ante cuyo paso un nuevo niño muere. Terror gótico etiqueta negra en el que los fantasmas son los protagonistas. Sin duda, uno los mejores libros para leer.
Cementerio de animales, de Stephen King
Algunos dices que este libro era tan terrorífico que el propio King dejó de escribirlo durante un tiempo. Aunque aún no haya encontrado una adaptación cinematográfica convincente, Cementerio de animales es posiblemente uno de los libros más escalofriantes del autor estadounidense. La historia narra el horror de una familia que se muda a un pueblecito de Maine donde un cementerio de animales libera a un primer “embajador”, el gato Church, el cual murió atropellado y cuya presencia confirma una vieja maldición india.
El gato negro, de Edgar Allan Poe
A pesar de sus pocas páginas y su carácter de cuento, el género insignia de Edgar Allan Poe, El gato negro es una de las historias más terroríficas de la historia. Una trama que presenta a un matrimonio de vida tranquila que vive con su gato, hasta que el marido comienza a abusar del alcohol, terminando con la vida del animal. Un adelanto cuyo desenlace confirma la genialidad del desgraciado autor que también murió a causa del alcohol en la calle, solo, envuelto en las tinieblas que definirían sus grandes obras literarias.
La llamada de Cthulhu, de H.P. Lovecraft
Pocos universos literarios resultan tan vistosos y escandalosamente imaginativos como el de Lovecraft, autor cuyos monstruos, realidades paralelas y magia macabra definen un pedazo de la historia de la literatura de terror. Para ejemplo, La llamada de Cthulhu, obra que condensa dos hilos narrativos, el de un profesor acosado por una secta y un marinero en alta mar, cuyo nexo es la presencia de un ser escamoso de 10 kilómetros de altura llegado del espacio exterior y sumergido en las profundidades del mar.
La feria de las tinieblas, de Ray Bradbury
Cuentan que el mago de una feria llamado Señor Eléctrico fue quien inspiró a Ray Bradbury a ser escritor. Uno de los mejores autores estadounidenses del siglo XX volvió a bucear en su propia infancia a la hora de crear La feria de las tinieblas, novela publicado en 1962 cuyos dos protagonistas adolescentes, Jim Nightshade y William Halloway, experimentan el terror en una feria que llega en el mes de octubre a la ficticia Ciudad Verde del Medio Oeste. Terror trascendental y exquisito.
Drácula, de Bram Stoker
Si existe un mito del terror ese es el conde Drácula, el famoso y vampírico personaje creado por Bram Stoker e inspirado en el sanguinario príncipe rumano Vlad El Empalador. Publicada en 1897, Drácula está narrada de forma epistolar a partir de diferentes documentos en su mayoría escritos por Jonathan Harker, abogado inglés que viaja al mítico castillo del conde Drácula, en Transilvania. Aunque no fuese la primera obra en incluir personajes vampíricos en la literatura, Drácula se convirtió en el más influyente de la historia.
La maldición de Hill House, de Shirley Jackson
Publicada en 1959, La maldición de Hill House nos traslada a una vieja mansión con ojos propios en la que los fantasmas recorren los pasillos y viejas maldiciones acechan en los rincones más insospechados. Un foco terrorífico que atrae a personajes perdidos en la vida y con serios problemas con sus padres. La obra de Jackson no solo puso de manifiesto el clásico recurso de las casas embrujadas, sino que inspiró al mismo Stephen King para El Resplandor y también una adaptación cinematográfica no tan acertada llamada La Guarida.
Desde el infierno, de Alan Moore y Eddie Campbell
Concebidas como historietas incluidas dentro de la colección Desde el infierno, existen diversos ejemplares que engloban el universo escrito por Alan Moore y dibujado por Eddie Campbell en los años 90. Centrada en los hechos acontecidos durante y tras los asesinatos de Whitechapel cometidos por el infame Jack el Destripador, esta novela gráfica ilustra el terror de las calles del Londres victoriano y la naturaleza de un personaje que aún sigue provocando tantos debates como escalofríos.
La semilla del diablo, de Ira Levin
Recién mudada a un nuevo apartamento en Nueva York, Rosemary comienza a tener relación con unos misteriosos vecinos. Al mismo tiempo, queda embarazada. Centrada en los ritos y reductos modernos del Satanismo en Occidente, La semilla del diablo es una de esas obras que consume la atención del lector in crescendo adentrándonos en un universo agonizante. La obra, publicada en 1967, sirvió de inspiración a Roman Polansky para su famosa adaptación cinematográfica protagonizada por Mia Farrow.
La casa maldita de Amityville, de Jay Anson
En diciembre de 1975, la familia Lutz se mudó a una casa a las afueras de Nueva York en la que un año antes se había cometido un asesinato múltiple. El terrorífico suceso que explicaba las nubes de moscas y voces que comenzaron a escucharse en mitad de la noche dando como resultado un laberinto de pesadilla. ¿Lo mejor (o peor) de todo? Que esto ocurrió de verdad, y el libro de Anson recoge con total detalle el mes de horror de esta familia.