Para la mayoría de nosotros, entrar en el taller de un ebanista supondría experimentar posiblem
ente alguna llamativa sorpresa. Por ejemplo, al descubrir que hoy día el maestro sigue utilizando la tradicional sierra de bastidor, un diseño tan exitoso que apenas ha cambiado desde la Edad Media.
Así podemos verlo en las tallas de piedra que pueblan los pórticos de las catedrales, donde el carpintero con la inconfundible sierra aparece junto con otros artesanos, armados de sus herramientas emblemáticas. Básicamente, la sierra de bastidor es una
H de madera, cerrada por abajo con la hoja de corte, y por arriba con una cuerda o alambre para tensarla.
Varias cualidades explican el longevo triunfo de la sierra de bastidor, que sigue siendo la herramienta manual más precisa y funcional para cortar madera. Ante todo, la hoja no se dobla, un molesto contratiempo típico de los serruchos normales, que rompe la concentración tan necesaria para trabajar madera. La tensión del bastidor, gracias al torniquete de cuerda o alambre, confiere a la hoja total rectitud, incluso cuando manejamos el utensilio con una sola mano. De esa forma podemos atender a lo fundamental en el trabajo de corte, que es
la marca, la línea a lápiz en la tabla que debemos respetar..
Sierra de bastidor |